El insomnio de mantenimiento
El insomnio de mantenimiento se manifiesta con frecuentes y prolongados despertares nocturnos, especialmente durante la mitad de la noche. Las causas que provocan insomnio de mantenimiento son diversas. Pueden ser efectos secundarios de algún medicamento o comúnmente se debe al estrés y ansiedad.
Al tener un sueño fragmentado aparecen una serie de síntomas como fatiga, somnolencia, dificultad para concentrase, disminución de alerta y desempeño, depresión durante el día y noche, dolor muscular e irritabilidad. Según una encuesta realizada por la Fundación Nacional del Sueño, el 54% de los hombres y el 63% de las mujeres han sufrido uno o más síntomas de insomnio.
Tipos de insomnio
El insomnio de conciliación
Se denomina insomnio de conciliación cuando aparece dificultad en el inicio del sueño (aumento de la latencia del sueño). Se considera normal una latencia del sueño inferior a 20 minutos en población infantil y adultos jóvenes, e inferior a 30 minutos para adultos de mediana edad o personas mayores.
El insomnio de mantenimiento
Hablamos de insomnio de mantenimiento cuando aparece la dificultad para mantener el sueño a lo largo de la noche. Este tipo de insomnio puede manifestarse con despertares frecuentes (insomnio intermitente) o con la imposibilidad de conciliar el sueño tras un despertar. En ambos casos se altera la arquitectura del sueño y disminuye mucho el porcentaje de sueño profundo.
Entre las causas que motivan este tipo de insomnio se encuentran:
- Enfermedades médicas
- Enfermedades psiquiátricas
- Abuso de sustancias como medicación, alcohol o drogas
- Una mala higiene del sueño
- Horarios laborales a turnos
Antes de recurrir a la medicación, hay varias cosas que puedes hacer para reducir el insomnio de mantenimiento:
- Levántate y acuéstate todos los días a la misma hora
- Haz ejercicio con regularidad
- Cena ligero
- No bebas alcohol, consumas nicotina ni cafeína hasta 3 horas antes de acostarte
- Elige un colchón y una almohada que se adapte a tus necesidades
Independientemente de las causas que lo produzcan, el insomnio puede ser transitorio, aquel que se produce durante un corto periodo de tiempo menor a un mes o crónico, que se prolonga en el tiempo durante un periodo superior a seis meses y puede durar años.
En una reciente entrevista a José Luis Relova, jefe del servicio de neurofisiología del CHUS y responsable de la unidad del sueño, para el número 7 de nuestra revista Soñadores, descubrimos algunas soluciones para este trastorno.