Pilates, más que una moda
El método Pilates, más que una moda, es un sistema de entrenamiento desarrollado por el alemán Joseph Hubertus Pilates a principios del siglo XX. Lo definía como “la ciencia y el arte del desarrollo coordinado del cuerpo-mente-espíritu, a través de movimientos naturales bajo el estricto control de la conciencia”.
La práctica de este deporte está dirigida a ejercitar los músculos de la espalda y de la base pélvica. También para corregir la alineación de la columna vertebral o el dolor lumbar. Los ejercicios de Pilates constituyen una mezcla de diversas especialidades, como el yoga, la traumatología y la gimnasia, favoreciendo tanto la flexibilidad como el tono muscular.
El Pilates no sólo es beneficioso a nivel físico, sino también a nivel mental. Se desarrollan aspectos como la estabilidad corporal, la fluidez de movimientos o el dominio de la respiración, con el fin de lograr el equilibrio y la conexión entre cuerpo y mente. Es por esta razón que al principio de su historia el Pilates fue denominado Contrología. El ejercicio se fundamentaba en el uso de la mente para controlar el cuerpo.
EVOLUCIÓN EN EL TIEMPO
Este deporte ha incrementado sus adeptos en gran medida en los últimos ocho años, etapa en la que comienza su expansión por Europa, América Latina y Oceanía. Sin embargo, su evolución se remonta a los años 40 del siglo XX, cuando su creador instaura su primer estudio en Nueva York, considerando el método Pilates como una técnica de rehabilitación enfocada casi en exclusiva al mundo de la danza. Poco después, fisioterapeutas y ortopedistas adoptan dicha técnica, y empieza a difundirse progresivamente por Estados Unidos, siendo Hollywood su entorno más prolífero por la abundancia de bailarines y demás profesionales del mundo del espectáculo.
EL PILATES Y TU ESPALDAS
Existe una tendencia en la sociedad a la adopción de malas posturas, consecuencia de los trabajos de oficina, o las abundantes horas al volante. Los ejercicios de Pilates ayudan a favorecer la alineación neutral de la columna, o lo que es lo mismo, una buena postura. Además, gracias a este método, se fortalecen también los músculos del núcleo del cuerpo, aquellos que funcionan como sistema de apoyo de nuestro torso. El entrenamiento de esta fuerza abdominal, junto con las técnicas de alineación adecuadas, convierten al método Pilates en un ejercicio completo. Conduce a la reducción del dolor de cuello y espalda, así como a prevenir o aliviar padecimientos como las hernias discales o la ciática.
Otros beneficios que aporta esta disciplina es el fortalecimiento de los músculos que, a través de sus ejercicios, se alargan hasta su extensión completa, logrando mayor flexibilidad y combatiendo el volumen muscular. Esto favorece la firmeza de la columna vertebral, así como la rehabilitación y la prevención de lesiones. Además, mediante una práctica regular del método Pilates, logramos un mayor control sobre nuestro cuerpo, lo que fomenta una mayor coordinación y una respiración más correcta, no sólo a la hora de hacer ejercicio, sino también en nuestro día a día.
Como todos los ejercicios físicos, el Pilates también ayuda a la quema de calorías y al incremento de los niveles de energía, lo que trae consigo un aumento de la autoestima y del buen humor, así como el fortalecimiento del sistema inmunológico. Estos beneficios serán más latentes si los realizamos de manera rutinaria en sesiones de en torno a quince minutos.
DESCANSA MEJOR CON PILATES
Mucha gente tiende a practicar este deporte por los beneficios psicológicos que le proporciona, siendo los más notables la reducción del estrés y la mejora del descanso. Sin embargo, los síntomas del estrés no son sólo psíquicos, sino que están íntimamente ligados a síntomas físicos. Los problemas emocionales se traducen muchas veces en falta de sueño o concentración, dolores de cabeza, malestares digestivos, y un largo etcétera de padecimientos que sobrepasan el nivel emocional. Realizar ejercicio físico produce endorfinas, lo que reduce la aparición de la hormona del estrés y disminuye la ansiedad, aportando sensación de placer. Los ejercicios en torno a la respiración favorecen la oxigenación, y a su vez, la eliminación de toxinas y la relajación, desencadenando en un sueño reparador.
ATRÉVETE A PROBARLO
Existen algunos ejercicios pensados para ser realizados antes de dormir, con los que lograras liberar tensiones y favorecer un buen descanso. Aquí os mostramos uno de ellos, para quienes se animen a empezar a practicar este deporte. Para realizarlo debemos tumbarnos boca arriba, con las rodillas flexionadas y las manos situadas bajo la cadera. El ejercicio consiste en mantener el estómago contraído, mientras expiramos y bajamos de una en una las rodillas hacia el pecho. Se deben realizar hasta diez repeticiones, al ritmo que mejor nos convenga. Con esto lograremos relajar los músculos y preparar nuestro cuerpo y nuestra mente para el descanso.
Lograr corregir nuestra postura durante el día hará que ésta mejore también durante la noche. Esto repercutirá directamente en la calidad de nuestro descanso y hará que nos despertemos sin ningún tipo de dolor muscular.
Descubre más consejos y curiosidades sobre el descanso y la vida saludable en el nº 5 de la revista Soñadores pinchando aquí.
